La poesía y la canción de autor siempre han estado muy ligadas. La segunda siempre ha bebido de la primera hasta emborracharse de acordes, y la primera ha tendido, sin saberlo, a exigir a la segunda un recato y un decoro lírico. Creo que la canción de autor se diferencia de otros géneros, además de por la emoción intrínseca que el género tiene o por valores que puedan recaer en la manera de entender el mundo del creador o del oyente, por tener un compromiso hedonista con el uso lenguaje y con sus posibilidades evocadoras, y también por basar su fuerza expresiva en el ánimo de buscar la imagen perfecta que sustituya a la descripción. Cuando uno escucha canción de autor sabe que el verbo escuchar es la suma del sentir, pensar, reflexionar y sobre todo imaginar.
Durante la historia de la canción de autor han sido muchos los cantautores que han musicalizados poemas propios o ajenos; así el ejemplo más notorio sería toda la carrera musical de Paco Ibañez, quien comenzó la tradición de cantautores en este país cuando en 1956 musicó el poema La más bella niña de Luis de Góngora. También han sido muchos, por no decir una gran mayoría, los que han compuesto canciones con una belleza lírica tan suprema que las letras de las mismas podrían considerarse poemas y no textos. Y también, durante la historia de la canción de autor, han sido varios los cantautores que además del arte de la música han cultivado el arte de la escritura. Se me ocurren como algunos ejemplos de esto último: Luis Eduardo Aute con su extensa obra poética (los libros de Poemigas maravillosos que ha escrito, o el indispensable Volver al agua), los sonetos de Joaquín Sabina (o su Con buena letra que recopila las letras de las canciones; la verdad que en el caso de Sabina es muy dificil separar la paja del trigo… es decir la poesía de la canción), los libros de poemas de Jose Antonio Labordeta (quien cultivó la poesía antes de empezar a cantar, y de quien me impresionó mucho su libro Jardín de la memoria), Pablo Guerrero con sus libros de poesías tan de contacto con la naturaleza y con los instintos primarios, Luis Pastor quien ha recopilado poemas hace unos meses en un libro que recomiendo y que lleva por título De un tiempo de cerezas, o Ángel Petisme quien en su carrera ha compaginado su faceta de poeta con la de cantautor con más de una veintena de poemarios y catorce discos a sus espaldas.
En los últimos tiempos hemos vivido una época en que algunos nuevos cantautores, que aunque lleven muchos años en escena digo «nuevos» para hacer la diferenciación con los nombrados en el párrafo anterior, se han dedicado a escribir libros con textos que se venden a millares en la sección de poesía de las librerias. También se han dedicado a compaginar recitales con conciertos y a decidir que poeta es una definición que uno se puede poner a sí mismo, y no una manera de vivir debatiendo con el tiempo que nos rodea. Y por supuesto se han dedicado a compartir en redes sociales frases sueltas con forma de espejo que buscan el vaho del me gusta, para que así el reflejo del egocentrismo sea más pulcro y claro. El poeta Oscar Aguado en su libro Un mundo para el hombre de hojalata se refiere a ellos con un término que me encanta: «cantautetas». Es un término que está entre cantautor y poeta, pero que suena más a cantar y a tetas. También el poeta Luis García Montero ha hecho referencia a esos cantautores superventas de libros en entrevistas y presentaciones de su último libro Balada en la muerte de la poesía, diciendo que la cantidad de lo vendido no se relaciona directamente con la calidad de lo escrito, y que «hay que negarse a pensar que sólo es bueno lo que se comunica con facilidad adolescente en los circuitos sentimentales de la sociedad de consumo».
Hoy, a las 21.30h, en el Café Libertad 8 de Madrid un grupo de cantautores presenta un libro de poesía titulado Poemas de autor. Hoy será una ocasión más para hacer verdadera la ya verídica afirmación de que la poesía y la canción de autor están muy ligadas. Hoy será un momento más para conocer las voces poéticas de gente a la que estamos acostumbrados a ver expresándose con canciones. Hoy en el Café Libertad 8 podremos comprobar si los cantautores implicados en el libro Poemas de autor se deciden por defender a la poesía con sus versos como debe ser defendida, sabiendo que es ella, y no ellos, la protagonista, o si la tratan como un producto mercantil más dejándola desprovista de reflexión y profundidad en su ejercicio. Los cantautores que han participado en el libro Poemas de autor son: Javier Cuenca, Andrés Sudón, Marta Plumilla, Pablo Tri, Gazituaga Jai, Sergio Sanz, Antonio Pastor Gaitero, Juan Antonio Ordóñez, Janire Bermejo Castilla, Fernando Bárcena, Gabriel Vidanauta, Lope Villano, Nico de Brozas, Juan Fernández Fernández, Nacho Torron, Juan Galgo, Javier Pascual Soriano, Juanlu Mora, Manu Clavijo, Miguel de Paul, Liz Scott Blacud y Fernando Prieto. Todos son habituales del Micro Abierto del Café Libertad 8, y tanto así que el libro Poemas de autor, editado por Inventa Editores, nació de un taller del micro abierto que llevaba por título, al igual que el libro que se presenta hoy, Poemas de autor.