Agosto es verano. Verano es playa. Playa es arena, mar y horizonte. Horizonte es libertad. Libertad es el lugar, Café Libertad 8, donde Esther Zecco actúa esta noche en uno de sus últimos conciertos antes de que salga al mercado su disco Carácter Retroactivo. Y Madrid no tiene mar, pero tiene agosto y sigue viva guardando bajo su pavimento la arena de todas las playas. Madrid en este mes puede parecer una ciudad aburrida e insufrible, pero no lo es. No lo es porque la felicidad se derrocha sobre el aluminio de la mesas de las terrazas que pueblan las plazas de la capital, y la alegría recorre las fiestas de los barrios y la cultura sigue explotando en cada garito siendo una opción indiscutible en la noche madrileña. Y en agosto, en Madrid, sigue habiendo conciertos. Y me parece más que un buen plan dejar de pronunciar la palabra playa y pasear a media tarde, cuando el calor dé una tregua, por las calles pseudodesiertas del centro, y tomar una cerveza en una terraza para terminar en el Libertad 8 a las 21h viendo a Esther Zecco.
Las entradas se pueden comprar en la puerta o con anticipadas con descuento en este link.